lunes, 29 de septiembre de 2008

Los niños corren sobre un mar despoblado,
las olas rebanan una a una mis entrañas.
No es el horizonte es la luna que se pierde,
la luna que atormenta a la eternidad.
Las balas retumban en mi cabeza, el sol
me alumbra, el murmullo del viento es mudo.
La sangre corre y mis colmillos atraviesan la
sagrada sombra de los cuerpos en celo.

lunes, 15 de septiembre de 2008

El placer de sentirte atado a mi sexo
es sólo un destello que envuelve
este cerebro que por momentos es más nítido.
Días de sexo, sexo de día; permanecer envueltos
en un sueño salvaje cuando la realidad nos
oprime es la felicidad impregnada en la piel.
Estoy muerta, en tus pies estoy muerta
tomamos el dulce beso de la eterna compañera
para viajar y deshacernos del tiempo.
La esclavitud ha terminado, el ritmo continúa
con su suave bamboleo; los cuerpos ya quedaron
deshechos.